La estimulación cognitiva pretende llevar a cabo una serie de actuaciones y actividades con el fin mantener y mejorar aquellos procesos cognitivos considerados como básicos:
Las personas mayores, aun estando sanas, tienden a presentar pérdidas de memoria producidas por el lógico proceso de envejecimiento o por el deterioro cognitivo leve.
La estimulación cognitiva muestra, indudablemente, una gran eficacia a la hora de prevenir para estos casos.
Por ello su objetivo es estimular para mantener, en la mejor forma posible, las capacidades mentales de las personas que sufran esos síntomas y entrenar sus habilidades para fortalecerlas. Esto ayudará al mejor desenvolvimiento de los pacientes en sus actividades cotidianas, al ver mejoradas sus habilidades funcionales y mentales.
Y no hay que olvidar que la mente es un “músculo” que necesita ejercicio, al igual que los músculos del cuerpo.